

El gobernador riojano comenzó a recibir señales de apoyo a su intento por presidir el partido Justicialista desde noviembre, cuando deben definirse autoridades.
Kicillof devolverá la visita a Quintela al participar de la presentación de la nueva Constitución, que modificó 20 artículos del texto original y agregó otros 30.
Cabe remarcar que la nueva Constitución de La Rioja, a diferencia de la anteriores con características políticas, tiene una impronta social estableciendo nuevos derechos para todos los riojanos, como los de cuarta generación, el derecho al agua, a la energía y a la conectividad, instaura la Renta Básica Universal y establece un límite a la periodicidad de las tres funciones del Estado, con la finalidad de tener una Carta Magna provincial de vanguardia para los próximos años.
Kicillof participará también de la firma de convenios de cooperación recíproca entre las dos provincias. A largo plazo, los dos mandatarios trabajan con la mira en la agenda 2027. Kicillof quiere ser la alternativa presidencial. Y tiene que construir una base de apoyo al interior del país, y del peronismo.
Quintela, por ahora, busca conducir ese espacio político. También se analizan reformas constitucionales en Tucumán, Tierra del Fuego, Catamarca, San Luis y Santa Fe. E incluso Kicillof anunció el año pasado que pretendía una reforma en la Constitución de Buenos Aires.
Kicillof afianza en tanto su gira por el interior del país: este año visitó varias provincias de distinto signo político: por caso Chubut, Santa Fe, y La Pampa. Ahora suma La Rioja donde Quintela mantiene un similar grado de enfrentamiento con las políticas de la administración de Javier Milei.
El mandatario bonaerense mantuvo en marzo y en mayo dos encuentros con el gobernador santafesino, Maximiliano Pullaro de la UCR, y cedió patrulleros y material tecnológico para fortalecer la seguridad tanto en tierra rosarina como en la parte norte de la provincia de Buenos Aires.
En mayo, el bonaerense viajó a Rawson y se mostró con Ignacio Torres, gobernador de Chubut. El mandatario del PRO recibió 15 ambulancias bonaerenses para cooperar con el sistema de salud de la provincia patagónica.
En junio estuvo en la provincia de La Pampa, gobernada por el peronista Sergio Ziliotto, otro de los críticos de Javier Milei que no dudó en calificar a la Ley Bases de “aberrante”.
El viaje a La Rioja de Kicillof supone un apoyo a las intenciones del mandatario riojano por presidir el partido Justicialista que se encuentra en una especie de vacío de conducción con la licencia de Alberto Fernández.
Los movimientos de Ricardo Quintela tienen como objetivo el ordenamiento del PJ no solo hacia el 17 de noviembre próximo, fecha pautada para una eventual interna partidaria si Cristina Kirchner decidiera participar o La Cámpora propone otro candidato, sino pensando en las elecciones legislativas del año 2025.
Quintela es el primer gobernador en ir a la Corte Suprema a reclamar contra el DNU, bajo el patrocinio de Raúl Zaffaroni, una petición que fue rechazada in límine. Además pudo frenar los aumentos de las tarifas de algunos servicios en su provincia. En abril, a través de un decreto, destinó fondos del Estado para que el aumento del precio de la energía no llegara a hogares ni a las empresas.
En su aspiración de presidir el partido ya recibió el respaldo de las 62 Organizaciones Peronistas. Quintela viene de recibir a una delegación encabezada por el dirigente de la Unión del Personal Superior de la AFIP Julio Estévez (h), con quien coincidió en la necesidad de “dejar de lado los personalismos y encarar un proyecto basado en la producción, el empleo y la industria nacional”.
En ese encuentro con las 62 (rama federada de la CGT), se coincidió en la «necesidad imperiosa de reorganizar el Partido Justicialista, sobre el consenso y la equidad”. Un punto que ya había sido escuchado durante la reunión que Axel Kicillof encabezó en la Quinta de San Vicente en ocasión del homenaje a Perón por 50ª aniversario de su fallecimiento.