

Por primera vez, el fondo oceánico argentino puede observarse en tiempo real, gracias a una transmisión en directo realizada por un grupo de científicos del CONICET. Las imágenes, captadas desde casi cuatro mil metros de profundidad en el Cañón Mar del Plata, ofrecen un espectáculo sorprendente de criaturas inéditas y escenarios asombrosos.
La expedición, bautizada "Underwater Oases of Mar del Plata Canyon: Talud Continental IV", representa un hito en la ciencia marina nacional. Se desarrolla en el Atlántico sur, en una zona hasta ahora sin explorar, y combina la tecnología más avanzada con un enfoque de colaboración científica internacional, bajo la coordinación del CONICET.
Desde el buque de investigación Falkor (too), los especialistas despliegan el vehículo submarino ROV SuBastian, una herramienta robótica capaz de grabar en ultra alta definición y recolectar muestras con un impacto mínimo en el entorno. "Es como tener un submarino con visión aumentada que baja por nosotros y nos lo muestra todo", explicó Daniel Lauretta, investigador del Museo Argentino de Ciencias Naturales y líder de la misión. Ya se han observado especies desconocidas, comportamientos sorprendentes y paisajes que parecen de otro mundo.
La transmisión se puede seguir en directo por YouTube, permitiendo a cualquier persona observar en simultáneo lo que ve el equipo a bordo. "Es como abrir las puertas del laboratorio, el barco y el fondo del océano, todo al mismo tiempo", resaltó Lauretta.
El Cañón Mar del Plata, situado frente a las costas de la provincia de Buenos Aires, es un punto crucial en el océano, por ser la unión de las corrientes de Brasil y Malvinas. Esto la convierte en una zona de altísima biodiversidad. Participan en la misión más de treinta especialistas de distintas instituciones, entre ellos jóvenes investigadores, técnicos y becarios del CONICET y universidades nacionales.
os objetivos de esta campaña son múltiples: analizar hábitats frágiles, identificar residuos humanos como basura oceánica y microplásticos, estudiar la biodiversidad del fondo marino, investigar el ADN ambiental, la reproducción de especies abisales, y recolectar datos sobre carbono azul y movimiento de sedimentos.