San Miguel | 23 nov 2024
Policiales/Crimen en San Miguel
La muerte de Nadia podría estar vinculada a una guerra territorial por el control del narcotráfico
Nadia Guzmán, una mujer de 39 años de la localidad bonaerense de San Miguel, murió de manera violenta en un episodio que es investigado bajo dos hipótesis principales.
Según la primera hipóteis de investigación, los hechos se habrían desencadenado durante una pelea vecinal. Sin embargo, la segunda hipótesis apunta a un trasfondo más complejo, relacionado con el accionar de un grupo conocido como el Clan Martínez, cuyos miembros están involucrados en diversos delitos en la zona.
Fuentes judiciales informaron que por este crimen hay una persona detenida, identificada como Juan Martínez, quien pertenecería al mencionado clan. Además, varios integrantes de esta organización están detenidos, acusados de manejar el negocio de la droga en los partidos de Moreno, José C. Paz y San Miguel, lo que plantea un oscuro y complejo trasfondo de una guerra narco entre clanes.
Según creen los investigadores, el grupo continúa con sus operaciones liderado desde la cárcel por Carli Martínez. Entre otros detenidos, también se encuentra quien su hermano, Alejandro Martínez, quien sería su principal colaborador, y un medio hermano identificado como Sergio Gamarra Martínez. Las autoridades sospechan que la muerte de Nadia podría estar vinculada a una guerra territorial por el control del narcotráfico, ya que el clan estaría implicado en al menos otros dos homicidios recientes.
El trágico hecho ocurrió el domingo 17 por la madrugada en el barrio Santa Brígida, cerca de las calles Salguero y Letonia, cuando un hombre arrojó una herramienta metálica con punta, similar a una lanza, que impactó en uno de los ojos de la víctima.
De acuerdo con la reconstrucción inicial, el episodio comenzó cuando el auto del hijo de Nadia, estacionado frente a su casa, fue chocado por otro vehículo conducido por un vecino. Al escuchar el impacto, el joven salió a la calle y comenzó una discusión que rápidamente escaló en una pelea. En la escena, los golpes de puño, empujones y corridas involucraron a otros vecinos, y uno de los testigos llegó a filmar parte del altercado.
El conductor del auto que colisionó al del hijo de Guzmán es vecino de la zona, y otra persona lo acompañaba al momento del choque. Ambos se enfrentaron no sólo a el hijo de Guzmán, sino a otros vecinos de la zona.
Nadia, alertada por el alboroto, salió de su casa para intervenir y defender a su hijo. Fue en ese contexto que, según se sospecha, Juan Martínez ingresó a su vivienda y desde el primer piso comenzó a lanzar objetos contra el grupo. Uno de esos proyectiles, una herramienta con forma de lanza, golpeó directamente a Nadia en el rostro, causándole heridas fatales. A pesar de haber sido trasladada a un hospital cercano, los médicos no lograron salvarla.
“Ella estaba durmiendo y salió porque a mi sobrino le chocaron el auto con el que trabaja de remisero. Cuando mi sobrino ve que le rompieron todo el auto, se pelea y viene J.M., y le tira una lanza en el ojo a mi hermana y me la desploma ahí mismo”, contó Liliana Guzmán, hermana de la víctima, en diálogo con Crónica.
“Yo necesito justicia por mi hermana, porque me la mataron sin motivo. Me la mataron acá mismo con una lanza con la que le reventaron la cabeza, estando la Policía, que no hizo nada”, agregó Liliana.
Por su parte, Mónica, madre de Nadia, también señaló la inacción policial: “No hicieron nada más que cargarla en el patrullero, estaban mirando la secuencia”. Además, recordó a su hija como una persona “decente, buena, sana”. “No era drogadicta, no era borracha, trabajó toda la vida, todo el barrio te lo puede decir”, afirmó.