La CGT volverá a sumarse este miércoles a la marcha por los jubilados en las puertas del Congreso, en la antesala del paro general que realizarán el jueves y que contará con el servicio de colectivos en el AMBA por la conciliación obligatoria que rige para el sindicato de la UTA.

"Lo advertimos y la realidad lo confirmó: el ajuste cayó sobre trabajadores y jubilados, mientras el sector financiero multiplicó obscenamente sus ganancias", se quejó la CGT durante una conferencia de prensa que brindaron los referentes de la central para ratificar la movilización y la huelga.

Ambas iniciativas contarán con la adhesión de la CTA Autónoma y la CTA de los Trabajadores y de los movimientos sociales, que desde las 12 de mañana se sumarán a la marcha al Congreso y luego se plegarán al paro del jueves.

"El Gobierno no atiende nuestros reclamos", se quejó la CGT en un comunicado y criticó las políticas de la gestión libertaria al considerar que "el ansiado equilibrio fiscal, obtenido a través del desmantelamiento del Estado (...) y del abandono de la obra pública, multiplico el desequilibrio social".

En tanto la Ciudad de Buenos Aires apeló el fallo del juez de primera instancia, Roberto Gallardo, sobre la seguridad de la marcha de jubilados programada para este miércoles.

El gobierno porteño, a través del Procurador General, sostiene que la cautelar emitida por Gallardo es nula y presentó una apelación para que se revoque dicha decisión.

En su solicitud, el gobierno pide que el caso sea elevado de forma urgente a la Cámara del Fuero en lo contencioso administrativo tributario y de relaciones de consumo, teniendo en cuenta la inminencia de la movilización frente al Congreso.

El jefe de gobierno porteño, Jorge Macri, aseguró que se garantizará la seguridad durante la manifestación, indicando que tanto las fuerzas de seguridad de la Ciudad como las fuerzas federales estarán presentes para resguardar el orden.

La situación genera expectativas en torno a cómo se desarrollará la marcha y qué medidas se implementarán para asegurar la integridad de los participantes.